Síntesis de las intervenciones del 12 y 13 de Octubre de 2014

Los niños, fuente de alegría y de fe   
El jueves por la mañana se reunía la VII Congregación general del Sínodo. En su programa: “Los desafíos pastorales en cuanto a la apertura a la vida”


“Hablar de la familia con una ‘gramática de la sencillez’ que llegue a los corazones de los fieles y a los de los no creyentes”. Esta ha sido una de las propuestas presentadas el jueves por la mañana por la VII Congregación general del Sínodo extraordinario de la familia, que tras haber concluido las intervenciones sobre el tema “Las situaciones pastorales difíciles” comenzó a responder a “Los desafíos pastorales en cuanto a la apertura a la vida”. En particular, hablando de los niños, “se hizo hincapié en el impacto negativo de la contracepción en la sociedad, que ha dado como resultado la disminución de la tasa de natalidad. De cara a tal panorama –se decía-los católicos no deben quedarse callados, sino que han de ser portadores de un mensaje de esperanza: los niños son importantes, dan vida y alegría a sus padres y consolidan la fe y las prácticas religiosas”.
 

La ambigüedad jurídica: enemiga de la mujer   
Expresiones confusas en el ámbito internacional ponen en peligro la integridad de los derechos en defensa del sexo femenino. De esto se habló el jueves por la tarde en el Sínodo extraordinario


“La Iglesia y la familia de cara a los retos educativos”. Este fue el tema que la VIII Congregación general del Sínodo extraordinario de la familia abordó el jueves por la tarde en el Vaticano. De manera particular, entre las decenas de observaciones expresadas por los padres sinodales, se puso en evidencia la ambigüedad de la expresión “derechos de la salud sexual y reproductiva”, que se han apropiado algunos Países y organizaciones del mundo: de hecho, estas expresiones “no tienen, en el ámbito del derecho internacional, una definición precisa, y acaban por encerrar en ellas principios que se contradicen, como por ejemplo la condena del aborto forzado y la promoción del aborto seguro, o también la protección de la maternidad y la promoción de la contracepción. Mientras estas leyes estén privadas de valores unificadores, la promoción de tales “derechos” representa un riesgo, porque puede influenciar la interpretación de otras normas, en particular en el campo de la lucha contra la discriminación de la mujer”.
 


El Sínodo: “Paz para las familias de Oriente Medio”   
Los padres sinodales se unen entorno al Papa pidiendo, en un Mensaje, que la Comunidad internacional devuelva la paz a Iraq, a Siria y a todo el Medio Oriente

“Elevemos al Señor nuestras suplicas por las familias iraquíes y sirias, obligadas, a causa de la fe cristiana que profesan o por pertenecer a otras comunidades étnicas o religiosas, a abandonar todo y a huir hacia un futuro privado de toda seguridad. Con el Santo Padre Francisco afirmamos que “nadie puede utilizar el nombre de Dios para actuar con violencia” y que ¡matar en nombre de Dios es un gran sacrilegio!”.
 
Este fue el Mensaje lleno de fe y de anhelo de justicia publicado por el Sínodo extraordinario sobre la familia el viernes 10 de octubre. Este quiso hacer suyas las intenciones de Su Santidad, y exhortó directamente a la Comunidad internacional para “que se esfuerce en restablecer la convivencia pacífica en Iraq, Siria y en todo el Oriente Medio”. El pensamiento de la Asamblea, así como su oración, se ha tornado hacia todas las familias del mundo que son maltratadas, sometidas a abusos y violencias.