La "santa" muerte y los sacrificios humanos


Cuando el demonio busca como engañar a los hijos de Dios.

Por, P. Modesto Lule msp


Recientemente me contacto una persona para que el ayudara ya que una compañera tenia una cuñada que quería ofrecer en sacrificio un niño a la “santa” muerte. Este caso fue de manera paralela a lo que sucedió en el Estado de Sonora México donde una familia fue detenida al comprobárseles que habían asesinado a 2 niños y una anciana. La sangre de estos se había ofrecido como ofrenda en dicho culto a este imagen y después habían sido descuartizados.

Lo referido anteriormente es una clara prueba que la devoción a este culto no tiene nada de positivo para la persona que busca tener una creencia o afianzarse a algo sobrenatural para pedir ayuda ante los problemas.

Algunos plantean el origen de esta devoción desde tiempos prehispánicos otros más bien presentan su origen después de una mezcla de imágenes, música, películas y fantasías. Otros presentan su origen en la Biblia y al mismo tiempo señalan que es más poderosa que Jesucristo ya que lo venció y por eso murió Cristo. 

Lo cierto es que esta devoción ha ido creciendo y lo que se creía que era solamente para algunos estratos de la sociedad ha alcanzado a todos los niveles. La necesidad no sabe de estratos y a todos alcanza.  Se pueden ver entonces devotos en los suburbios más alejados hasta en las personas que aparecen en escaparates o a la luz de los reflectores y ante las cámaras de fotografía y de video. No importa si la persona es o no creyente de esta devoción, al ver la oportunidad para salir del problema toma la devoción y la hace suya cegado, tal ves por su desesperación o lo que sea pero entra a ese mundo del que muy pocas veces pueden salir.

Los que sufren de analfabetismo religioso pueden pensar que no tienen nada de malo la devoción a la martita como la llaman algunos, por el mismo hecho de que rezan el rosario, el padre nuestro, tienen misa, les dan sacramentos e incluso, aunque suene a sarcasmo ofrecen exorcismos. 

Un católico que no sea practicante puede salir engañado y acudir a estos cultos pensando que no hace nada de malo por la actividad religiosa que ve en sus templos. Con decirles que el mismo grupo promotor del culto tiene un nombre que es sugestivo, se autonombran misioneros de san Felipe de Jesús y del sagrado corazón. 
Quien lo escuche podrá asegurar que el culto de la blanquita es relacionado con la Iglesia católica. Aparte de la falsa devoción que promueve hay otras cosas por la que no podemos llamarle católica. Este grupo o sus falsos ministros promueven el matrimonio de sacerdotes, el aborto, los anticonceptivos o abortivos, la unión entre homosexuales y lesbianas y muchas cosas más contrarias a la fe católica. Con esto simplemente se pude deducir que el grupo no tiene nada de católico. Es más no tiene nada de sano espiritualmente y con justa razón podemos decir que lo que está detrás de todo este culto son fuerzas oscuras que buscan engañar a los incautos. 

Muchos aseguran que han recibido favores solicitados a dicha imagen y que se los ha concedido. No hay una seguridad de saber si es cierto lo que dicen, pero es curioso ver en Internet toda la lista de peticiones que le hacen y asombrarse al ver que la mayoría de cosas son para hacer daño a otra persona. Piden males y perjuicios, desde los que se enferme cierta persona hasta que pierda la vida. Alguien que tenga la intención de buscar a Dios nunca va a pedir esas cosas negativas. Lo que mueve a este culto es odio, rencor, coraje, egoísmo, soberbia, actitudes que nos alejan más de Dios y nos acercan más al diablo.

Y por si ya entraste a este mundo busca alejarte de todo tipo de imágenes y de ritos de este culto. Busca destruirlos antes de que se destruya tu vida. Busca los sacramentos, la misa, la lectura de la palabra de Dios, la oración y que alguien vaya a tu casa a bendecirla. No dejes pasar más tiempo ya que mientras más tiempo pasa más poder y fuerza toma sobra la persona este espíritu maligno. Con total seguridad señalamos que este culto es un engaño más del demonio para desviar a los hijos de Dios del camino verdadero y llevarlos por sendas oscuras.